Me permito presentar a este querido amigo, Alberto Painetrú, prodigioso artista autodidacta, especializado en complejas soldaduras que supo utilizar su trabajo en un ARTE prodigioso que lo transforma en un artista de una sensibilidad maravillosa Y de la excelencia que tienen cuando se las aprecia directamente. De la simpleza que esconde una figura artística destacada, es una demostración de la riqueza humana que guarda nuestra Argentina insólita.
Adolfo Saadia